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Mostrando entradas de julio, 2021

De reposteros excelsos, magos prestidigitadores y cerrajeros neófitos

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 Acostándome a las 4 y media difícilmente podía levantarme antes de las 11. Cuando conseguí separarme de la cama, fui directo a la cocina a empezar con la comida y el postre; pollo al horno y unas magdalenas de azúcar y de chocolate. Después de 1 hora al horno el pollo quedó poco hecho por algunas partes, así que para evitarlo en futuras ocasiones compré un termómetro  de cocina. Pasé la tarde con mi hermano, él aprendiéndome trucos de magia y yo a abrir cerrojos con ganzúas. Aunque la idea de la noche era salir con los compadres, dos tenían cena familiar hasta tarde y yo me encontraba regular, así que a las 11 y poco me acosté con la idea de descansar un poco la vista y no me volví a despertar.

De reencuentros fraternales, alianzas al Catán y paseos en coche

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Como cada viernes, me deshago en elogios al combo de teletrabajo+horario flexible; después de 4 horas de curro, a la 1 ya había terminado hasta el lunes que viene. Para comer terminé de hacer un arroz con pollo que tenía medio preparado, y un ratete después vino mi hermano de Ocaña tras pasar julio entero allí entre el trabajo y el bixo.  Pasamos la tarde juntos poniéndonos al día, haciendo una cata a ciegas de leches de soja y cortándole el pelo con un degradado to fresh, y para cenar hicimos unas empanadillas. Aquí con Super Mario Por la noche salimos a la misma hora de casa de casualidad, y como el bueno de Fernando vino a recoger a mi hermano en coche, de paso me acercó a la casa de Álvaro, donde los compadres llevaban  ya un rato bañándose y cenando. Estuvimos jugando una partida al Catán bastante entretenida; desde el principio Marta tuvo dos objetivos; construir la carretera más larga y enemistarse con todo el mundo, y cuando solo le quedaba  por construir un camino para unir su

De primeras dosis de vacunas y primeras clases de boxeo

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Sobre las 10 me pasé por el centro de salud a por la primera dosis de Pfizer. Fue to rápido; me acerqué a un mostrador a preguntar si era ahí y cuando me quise dar cuenta una chica se había acercado por la espalda y me había vacunado. Pasé el resto del día sin molestias ni efectos secundarios, y a las 9 me pasé por el Borán a boxeo. Ángel y Jesús me estuvieron aprendiendo a tirar puños generando fuerza con los pies y la cadera. Luego hicimos varios ejercicios alternando técnica y puro cardio y al final nos tumbamos todos en el suelo en círculo y cada uno fuimos proponiendo un ejercicio corto (plancha, burpees, flexiones...) hasta que dimos una vuelta. La clase estuvo genial, aunque me faltaron unas vendas para poder pegar más fuerte sin miedo; cuando salí me busqué unas por Amazon y después de pedirle al Félix su visto bueno las encargué para la clase del martes que viene. Entre que llegué a casa, me duché y cené me dieron casi las 11, y me enganché a media a la peli  Una buena receta

De lavanderías y paseos en coche

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Fue una mañana de curro intenso trabajando en migraciones de bases de datos, revisiones de merges requests, políticas de actualización en Perl y de ayudar a Belén con el sincronizador de C++ (te parece suficiente detalle, María?) Sobre las 6 me pasé por la lavandería que han abierto hace poco (o al menos que yo no conocía) a lavar las colchas de invierno. En la media hora que tardaron me puse el último podcast del Pazos , que previsoramente me había bajado en mp3 en casa. Cuando acabaron de lavarse volví a casa, las tendí para que se terminaran de secar y me empecé a cambiar para salir a correr con los compadres, pero a mitad me di cuenta de que era tarde, estaba cansado después de dos días seguidos, por la noche tenía lío y mañana iba a tener la primera dosis de la vacuna y la primera clase de boxeo, así que me lo pensé mejor y me bajé del tren del cardio. Un rato después de cenar quedé con María y fuimos a dar una vuelta por Bolaños (sin GPS) mientras aprovechaba para enseñarme lo gr

De runners acompañados y pelis entretenidas

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Después de currar me pasé por casa del Edu a por las cosas que me trajo de Madrid, principalmente el mando de la PS4 para poder rocketear con mi hermano. Luego me pasé por el Borán para preguntar por los horarios de boxeo, que después de hablar con el Félix me entraron ganas de que me aprendan, aunque lo que principalmente me llama la atención es lo en forma que terminas. Si no cambia nada, el jueves a las 9 voy a una clase de prueba. Luego salí a correr media horilla con el Jaime y el Edu, y por la noche vimos Mientras duermes .

De runners solitarios y pelis aburridas

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Después de currar estuve intentando mover hilos pero nadie quería hacer nada, así que terminé saliendo solo a correr 40 minutillos por la vía verde, y por la noche acabamos viendo Contacto Directo , una basura que flipas.

De impostores y dramaturgos

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Después de una mañana tranquila terminando secundarias en el Valhalla horneé una dorada a la sal para comer. Un poco más tarde, sobre las 6 estuve jugando con el Nitro y el Diego al mapa de la feria del L4D2, pero después de que nos mataran 3 veces seguidas en el mismo puto sitio decidimos que ya habían sido suficientes zombies por una tarde y quedamos en la plaza para tomar algo también con el Félix. Después de comprarnos unos heladetes para combatir el calor nos dimos cuenta de que llevábamos todo el día sentados y decidimos dar una vuelta por el pueblo. Terminamos en el merendero del quijote y estuvimos jugando un Among Us para que el Nitro lo probara. Volví a casa bastante justo de tiempo, así que me duché y me puse bien verde bacano para ir a ver qué se contaba Calderón. Aunque la idea era haber ido con María al final no pudo venir por un contacto con un positivo, así que se vino mi home Jaime. Fuimos a ver El príncipe constante , y a pesar de que íbamos bastante condicionados po

De milanesas y cartas antiguas

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Aunque creo que aún me queda como 1/3 de la historia del Valhalla me apetece mucho más roamear por el mapa, levelear, hacer secundarias, matar minibosses... así que con eso estuve hasta las 12. Para comer hice bizcocho de zanahoria y unos cachopos con papitas fritas. Por la tarde estuve matando un poco el tiempo con el Valhalla y algún vídeo de YouTube hasta que me duché y me pasé por Macondo. Me esperaba una librería medio vacía pero estaba hasta arriba, y como poco después se pasó Natalia a saludar y decir que se iba a Mercadona a por manjares para Arroz me fui con ella. A la vuelta fuimos a dejar la compra al piso, donde aproveché para alimentar al conejete. Volvimos a Macondo para decidir qué hacíamos por la noche, y como la Boda Roja de la Jessi ha dejado bastantes positivos en Almagro no me apetecía especialmente ir a la plaza (y menos aún a 3 días de la vacuna) así que pedimos unas milanesas y quedamos en ir al solar a cenar. Eran las 9 y media, y como quedaba un ratete pa

De días perezosos

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Terminé de currar un poco después de comer, y fue una de las tardes más perezosas que recuerdo en años; no me apetecía hacer absolutamente nada, y estuve matando el tiempo viendo vídeos de YouTube. Aunque la idea de la noche era quedar para tomar algo, con la boda full covid de hace unos días el pueblo está regular, así que pensamos en quedar en alguna casa para tomar algo, pero al final no decidimos nada no fuimos a ningún sitio. Me quedé en casa viendo Kingdom: la historia de Ashin , que aunque parecía una película al final resultó ser una especie de capítulo largo de una serie asiática, aunque aún sin todo el contexto de la serie estuvo entretenida.

De partidos de volley cancelados y cruces de piernas

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Sobre las 7 me pasé un rato por Macondo y pasé el resto de la tarde con el librero con pendientes. Aunque la idea era ir a jugar al volleyball con sus primos a última hora me lo pensé mejor y me bajé del plan. En su lugar, cuando cerramos me fui a casa a ver  Instinto Básico , que la tenía pendiente desde hace 30 años.

De conejetes cimarrones y móviles robados

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Sobre las 7 me pasé por Macondo y estuvims comiendo croasanes de chill con Marta y Maite. Al rato llegaron Joseda, Gema, Alberto y Laura, y a la hora de cerrar me fui con Jaime a casa de Natalia a por la camiseta de su cumpleaños y, de paso, a ver a Arroz. Estuvimos intentando tamearle, pero a pesar de jugar nuestras mejores cartas no se dejaba acariciar. Al final le lureé con comida y cuando bajó la guardia le hice la envolvente y le atrapé cerrándole todas las vías de escape. A pesar de todos mis esfuerzos y caricias al final se terminó escapando, así que me quité con un rodillo la ingente cantidad de pelo que tenía en las piernas y fuimos a la plaza con el resto. Cuando llegamos, Alberto y su jambita se estaban yendo y al poco llegó Fer. En algún momento de la noche dijo que tenía un móvil nuevo y se acabamos quitando con la excusa de probar la cámara. Al final nos fuimos sobre las 12 a nuestras respectivas casas, una buena hora para poder levantarnos  fresquitos mañana.

De tardes vendiendo libros y noches corriendo por el campo

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Definitvamente voy a empezar a obviar el tiempo de curro. Sobre las 7 me pasé por Macondo y estuvimos chapando con Natalia y podo después con Fermín, a quien solo quieren para que les compre libros. En la librería decidimos que aún habiendo jugado al fútbol ayer íbamos a salir a correr por el campo, así que nos separamos para cambiarnos cada uno en nuestra casa y 10 minutos después estábamos preparados en la de Álvaro. Media hora después terminamos y nos fuimos al bar del parque del Clavero a reponer sales. También avisamos a Fermín, que se acercó en un momen. También nos hicimos una foto, y Fer parece nuestro primo chiquito. Aunque ellos se quedaron un poco más yo lo vi regular y me fui a casa sobre las 11, cené, me duché y a las 12 estaba en la cama (aunque se me lio viendo vídeos de YouTube).

De partidos de fútbol y lesiones de última hora

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Aparte de un correo del Rafa diciendo que teníamos telecurro hasta el 30 de agosto, antes de las 8 no pasó nada relevante, así que vamos a hacer una elipsis hasta que los compadres pasaron por casa en coche para ir al pabellón nuevo. Cuando lleguemos puse la cámara a grabar como el otro día, pero como soy imbécil no me di cuenta de que lo tenía en modo foto, así que en lugar de grabar un vídeo de una hora hice una foto borrosa del suelo y no me di cuenta hasta que terminamos.  Aunque estábamos 8 para un 4v4, al Félix le dio tremendo tirón en el cuádriceps con el primer disparo que hizo y no pudo seguir jugando, así que volvimos al 4v3 asimétrico. En mitad del partido llegó Natalia, a quien se la recibió con vítores, aplausos y ovaciones, y se sentó con el lesionado Félix hasta que terminamos de jugar. Luego lo estuvimos hablando, y aunque el partido estuvo muy bien el jueves lo pasamos un poquito mejor. Cuando terminamos volvimos en el coche de Juan a casa, y Edu se vino para que le di

De coloquios videojueguísticos y experiencias nuevas

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De nuevo me quedé sin mañana, pero lo que parecía ser una tarde de chill terminó estando bastante bien. Sobre las 5 el Carlos me dijo que estaba en el Marqués con los hermanos Moreno y en cuanto terminé la entrada de ayer fui pa allá. Estuvimos comentando el partido del jueves y hablando de videogames, y una hora después fuimos a su oficina y para seguir chapando del Outer Wilds. Cené en casa y quedé con María para dar una vuelta bastante guay por el campo. Cuando volvimos nos quedamos un ratete en el parque de siempre hablando de listas de reproducción, de profesoras de inglés y de emails antiguos. Nos despedimos cerca de las 2 y nos fuimos en nuestros respectivos coches a casa.

De gatos en cajas de leche, luces policromáticas y accidentes de coches

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El precio de acostarse tan tarde es quedarse sin mañana. Después de comer seguí un poco con el Valhalla (aunque el pobre portátil parece que intenta despegar) e hice un bizcocho de zanahoria con mascarpone para por la noche. Entre que me duché y terminé de preparar todo este flow me dieron las 10, y fui al estudio del Santi. Al poco de llegar también llegó Natalia, y nos quedamos un ratete jugando con el gatete de la ducha. Estuvimos en la terraza de LEDs policromáticos cenando de chill. Como al final no nos hicimos una foto todos juntos (aún estando en un estudio de fotografía) cuelo una que me hizo el Jaime. Y por supuesto, después de la cena vino en postre, tras el que el jurado se deshizo en halagos y lisonjas al chef repostero (no sé qué pasa pero cada vez hago las fotos peor). Al poco llegaron los Santacruz y estuvimos jugando al 21 (contar hasta el 21 y añadir una regla nueva cada vez que lleguemos) y a la moneda (he nacido para jugar a ese juego) un par de horas hasta que oímos

De bares nuevos, cosquillitas y puertas azules

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Con el partido de ayer me levanté más tarde de lo normal (y, sorprendentemente, sin agujetas) así que entre unas cosas y otras no terminé de currar hasta las 6. Estuve matando un poco el tiempo con los desafíos de maestría del Valhalla y haciendo la cena y a las 10 llegué a Macondo a tiempo para cerrar e irnos a buscar un bar con alguna mesa libre. Terminamos en el que está en frente de Ezequiel, y poco a poco se fue uniendo gente hasta que terminamos un grupo la mar de majo. Como siempre, terminé liando a alguien para que me hiciera cosquillitas. Nos echaron sobre las 2 y media, y de vuelta a casa pasamos por la famosérrima puerta azul y aproveché para hacerme yo también una foto.

De partidos de fútbol asimétricos

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El día transcurrió sin mayores sobresaltos hasta por la noche. A las 10 y media habíamos quedado para jugar al futbol en el pabellón nuevo (en la descripción del vídeo hay algunos highlights). Jugamos abrazados al fair play y bajo la bandera de la deportividad, y cuando terminamos estábamos cansadísimos pero contentos. Lo de que estábamos cansadísimos iba en serio; llegué a casa, me duché lo más rápido que pude, me metí en la cama y caí rendido.

De tardes en la librería y paseos nocturnos

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Después de currar y jugar un poco al Valhalla (no tiene nada que ver la experiencia gaming en el portátil y en la bestia) me pasé por Macondo con el librero Briñas. Estuvimos hablando hasta que a las 8 largas llegó la señ Natalia de currar. Estuvimos hablando hasta las 9 que cerramos, nos despedimos del tenista y nos fuimos a Ezequiel a tomar algo. Una ronda después lo pensamos mejor y nos fuimos a dar un paseo por el pueblo mientras seguíamos hablando. Al final nos despedimos casi a las 12, por lo que al llegar a casa cené y no mucho más tarde me terminé acostando.

De librerías concurridas y cervezas en la plaza

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Sobre las 7 salí de casa y, después de cruzarme con Diegazo e intentar convencerle (creo que sin mucho éxito) para unirse al partido del jueves, llegué a Macondo y me encontré con que Marta Barrios se me había adelantado. Estuvimos poniéndonos al día durante una hora larga hasta que ella se fue más o menos a la misma vez que llegaba Natalia; fue una visita fugaz, pero suficiente para colarle algunos chistes de parejas. A las 9 llegó Edu, chapamos la librería y nos fuimos al Marqués a tomar unas cerves.  Poco después volvió Marta y a lo tonto nos dieron las 11. Al final nos acercó en coche a uno a nuestras respectivas casas, y después de cenar algo no tardé mucho en acostarme.

De entrenamientos espartanos por el campo

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Por la mañana he salido al patio a tomarme el café y me he encontrado con que el viento ha roto una de las patas de la carpa por la noche, y el resto medio se han doblado. Esta tarde, después de muucho insistir, he salido a correr media horilla por el campo con el Jaime y el Edu con la excusa de entrenar para el potencial partido del jueves. Salimos bastante tarde por el calor, así que entre que volvimos a casa, me duché y cené me dieron las 11 largas.

De bebés y juegos de mesa

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Me desperté a las 12 sin saber ni en qué semana estaba, pero tras un cafetito todo empezó a volver a tomar forma. Entre preparar la comida, comer y recoger me dieron las 4, y estuve escuchando canciones del Bizarrap  hasta que a las 5 el homie Nitro me dijo que me pasara por su casa con los hermanos Moreno a pasar la tarde. Como hacía 43 putos grados en la calle fuimos en coche, y estuvimos jugando un rato con Elara y cuando Ceci se la llevó para visitar a sus señores padres estuvimos jugando al Trial by Trolley (de los jambitos de Cyanide & Happiness ) y al Subterra. Al volver a casa hice una empanada para cenar y la comimos viendo Up in the air .

De tardes buscando pisos y noches haciendo masajes

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Como los sábados en Almagro, fue una mañana de cocinar; hice mermelada casera con los higos del campo y solomillos al Jerez para comer. Por la tarde, Edu vino a casa sobre las 6 y algo y seguimos buscando pisos en Madrid hasta casi las 8, que fuimos a Mercadona para comprar bebida y hamburguesas para la noche. Al volver a casas y dejar las cosas nos dimos cuenta de que no teníamos hielo, así que fuimos al chino de la plaza y de paso nos quedamos un ratete en Macondo esperando a Joseda. Como los libreros se quedaban abiertos hasta las 10 por el teatro, volvimos los 3 a casa y fuimos enfriando las bebidas y encendiendo el carbón. Sobre las 10 llegaron la señora De Briñas y su hermana y al poco los libreros, y como habíamos sido previsores pudimos cenar al poco, momento en el que volvió Álvaro Chicote. Nos quedamos hablando en la mesa hasta las 2 y algo, momento en el que propuse  alguien propuso jugar unas partidas a los hombres lobo. En algún momento de las primeras partidas el

De tarasís y secretos no tan bien guardados

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Acostándome a horas tan intempestivas empecé a currar a las 10 y media, así que terminé sobre las 5. Después de unas gestiones sociales (hablar un poco por whatsapp) fui a una alfayate del pueblo a que me arreglara una camisa que me compré anteayer, porque uno de los problemas de ser alto y delgado es que tengo que comprarme camisas grandes por los hombros y pecho y luego me están enormes de vientre y cintura. Después de que cogiera las medidas nos pusimos a hablar y a lo tonto no volví a casa hasta las 8 y media, cené un sandwich mixto to rápido y me fui a la plaza con los compadres.   De camino me encontré con Nitro, que aunque estaba con sus amigos se había alejado con Elara para ver si dejaba de llorar un poco, y estuvimos hablando un rato. Estuvimos todos con Alberto y Laura, aunque se fueron cuando nosotros fuimos al Ezequiel a hablar de la Constitución de números aparentemente arbitrarios que se habían inventado los libreros. Natalia y su hermana llegaron a la 1 y media de ver l

De noches de teatro

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Aparte del curro, fue un día whatsappearamente ajetreado; estuve recomendando un portátil nuevo a la compañera de piso de Sarah, hablando con los panas de Cádiz y con algún amiguete de Almagro al que hace mucho que no veo y buscando un programa piratilla para otro. Terminé de currar a las 6 y algo y enseguida me puse a prepararme para poder tener listo todo este flow para la noche. Quedé con María a las 8 y media, y como quedaban un par de horas para que empezara la función fuimos a un parque a ponernos al día y a ver los reels de su wee viaje por la costa norte de Escocia. Al llegar al teatro nos acomodaron rápidamente y apenas 5 minutos después empezó la obra, Castelvines y Monteses . Dos horas y poco después terminamos, y aunque el argumento no era nada muy loco (está basada en la misma leyenda que Romeo y Julieta, solo que esta acaba con todos contentos), la puesta en escena es una locura. A la salida volvimos al mismo parque a discutir las entretelas de la obra y sobre las 2 y med

De viajes en AVE y tardes de compras

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Me desperté solo a las 7 como un champ así que terminé de preparar las mochila y a las 8 y poco estaba en la oficina. A las 4 me fui en cercanías con el Jorge a Atocha y al llegar nos quedamos fuera haciendo tiempo mientras hablábamos de lo solitaria que se está volviendo la vida adulta. Al llegar a Ciu me fui con Máter a dar una vuelta por el centro y ya que estábamos por ahí aproveché para comprarme algo de ropa para el mes del teatro (si lees esto María mañana voy a ir bien bacano). Después de ojear casi todas las tiendas del centro fuimos a cenar al KFC. Ya en casas, después de deshacer la mochila y meter la ropa a lavar y antes de acostarme, estuve animando un poco a Sarah, que está preventivamente confinada y sin fuerzas para trabajar.

De mañanas movidas y tardes de quereseres

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A finales de la semana pasada empezamos a trabajar en una movida que se empezó a complicar exponencialmente y entre ayer y hoy hemos estado de reuniones para cuadrar migraciones y cambios en general. Hoy ha venido el Jorge y le he cazado en uno de los puntuales momentos en los que está con el móvil. Por la tarde he quedado con el casero para pagarle el mes y luego he puesto una lavadora y la he tendido, y como luego no tengo nada para el blog pues me he entretenido grabándolo. Aunque por la noche íbamos a quedar para jugar al Left 4 Dead el partido de España en el mundial lo ha cancelado, así que he terminado de conseguir a Excálibur en el Valhalla y con eso y unos partis al Rocket me ha dado la hora de cenar. Como me voy mañana a Almagro, he rematado lo que tenía a medias, he preparado la mochila y, si todo sale bien (no como el resto de las noches), estoy en la cama antes de las 12.

De partidas hermanales con coches que juegan al fútbol

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Hoy ha sido un día de curro movido, con un par de reuniones largas y varios tests SQL. Por la tarde estuve moneando un poco hasta las 8 que jugué gané con mi hermano varias partidas al Rocket, hasta que perdimos en la que me iban a subir a Diamante III.

De más visitas a pisos y running entre coches

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 Por la mañana estuve limpiando y ordenando el piso y después de comer fui a ver un piso. No estaba mal pero le faltaban la mitad de las cosas y la casera no parecía muy por la labor de comprarlas. Después me quedé media horilla corriendo en los carriles en plan parque que hay en la Avenida de la Ilustración con un par de podcast del Pazos de fondo y por la noche estuve whatsappeando hasta acostarme.

De tardes jugando a las cartas en parques y despedidas de mejores amigas

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Por la mañana estuve en el piso de chill y me hice para comer tortellinis de espinacas y ricotta y salsa de tomate con albahaca. Había quedado a las 7 y media con Bea & co. en el parque Juan Carlos I, pero sobre las 5 y media estaba un poco aburrido en el piso y me apetecía andar así que se me ocurrió ir dando un paseo. Resulta que estaba mucho más lejos de lo que había anticipado, y una hora después aún me quedaba hora y media, así que cambié de plan e hice el camino que me quedaba en Zity. Ya en el parque estuvimos jugando a las cartas hasta que se nos hizo de noche; al Coup, Sushi Go y al Virus con expansiones. También intentamos jugar al Patos al agua pero el viento nos lo impidió. Sobre las 12 nos fuimos; Carol y Rodri en metro y mi mejor amiga Bea nos acercó primero a Cris y luego a mi a casa, nos quedamos hablando un ratete y nos despedimos para no volvernos a ver hasta septiembre.

De incendios cercanos y conciertos en huertos

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Como la tarea con la que estaba de repente se embarró muchísimo, tuvimos que organizar una reunión multitudinaria para el lunes y me quedé sin nada que hacer estuve aprendiendo a Raquel un poco de C++. Como todos los viernes, la empresa estaba prácticamente vacía así que comí tarde y solo. Sobre las 3 empezó a verse un poco de humo que a los 5 minutos se había convertido en una columna negra azabache, que luego vimos en noticias  que fue por el incendio de un centro comercial en obras calle abajo. Aunque me podía haber ido, al subir a por mis cosas Enrique me pidió ayuda para solucionar una cosa, y después de arreglarlo me comentó de pasada que era de San Fernando, le conté mi fugaz viaje allí cuando vivía en Cádiz, dimos una vuelta por Google Maps mientras me enseñaba los lugares más típicos (resultó que la plaza donde comí estaba era de su instituto) y acabamos hablando de lo vicio que