Diario lacónico

Por la mañan dimos una vuelta por la playa. Y estuvimos tomando algo en una cafetería a pie de playa mientras Rocío llegaba de Marbella y fuimos todos a comer al Gottan de Huelin. A las 3 y media nos despedimos de Jose y Rocío y volvimos en el coche de Félix a Almagro. Y tras una pequeña parada táctica en un bar de carretera para hacer pis pasamos el viaje sin contratiempos y llegamos a Almagro 4h después de salir. Saludé a mis progenitores, recogí las cosas, cené algo y estuve leyendo hasta las 11, que me acosté.

Nos levantamos a las 7 y media y media hora después estábamos saliendo hacia Almuñecar para reencontrarnos con Joao (Yván se ha ido unos días a Francia y no pudimos ir en barco). Aunque el José pilló la salida hacia el norte por costumbre y perdimos unos minutillos volviendo recalculando el camino. A las 8 y 20 nos reencontramos con el Joao y fue como si no hubiese pasado el tiempo. Mientras nos poníamos los neoprenos estuvimos charlando con Michael, un man de New Castle con el acento más cerrado que habíamos escuchado nunca. El Joao tenía un par de manes a los que instruir y nos fuimos con Sandra  en la furgo hasta la playa de siempre. Hicimos dos inmersiones y ambas fueron espectaculares. En la primera fuimos por la derecha de la cala y pasamos bajo unos arcos submarinos y vimos una barca hundida y en la segunda vimos un montón de pececillos NPC, un pez San Pedro y hasta un pulpillo escondido en unas rocas. El regalo del cumple de Jose eran unas gafas de b...

Como ayer, pasamos la mañana trabajando. Aunque aprovechamos el descanso de las 11 para arreglar la mesita abatible del salón. Un poco antes de las 2 llegó Pedro al piso e instantes después estábamos saliendo a comer en el Rocamar , nuestro chiringuito a pie de playa de confianza. Y luego a una cafetería cercana a por el postre. Volvimos al piso para terminar de currar y Pedro aprovechó para darse una vuelta por el barrio. Terminamos cerca de las 6 y fuimos los 3 a dar una vuelta por el malecón mientras llegaban los Moreno, aunque los nubarrones negros que se alzaban sobre nosotros nos hicieron no alejarnos mucho del piso. Así que terminamos de esperarles resguardados de la lluvia. Los hermanos Moreno llegaron a las 10 y fuimos a cenar al Taró  (que Rocío nos contó un par de días después que significa bruma marina). Tanto el pulpo como la pluma estaban espectaculares Volvimos al piso, algunos nos ec...

Me desperté a las 6:45 y salí del piso como un auténtico ninja sin despertar a nadie y fui para Atocha. Y pasé las 3h de viaje a Málaga trabajando como un verdadero animal. Llegué a Málaga a las 10 y media. Y al llegar fui al barrio de Jose a desayunar en el  bar de siempre . Luego volvimos a su piso y pasamos el resto de la mañana trabajando. Hizo un rancho para comer, echamos unos Unites y curramos un rato más hasta las 5 y media, que fuimos al centro en bus para que el Jose diera una clase a los mayores (los que en la UCLM llamábamos Saramagos) y yo asistí de oyente. Y esta imagen nos servirá para convocar a la squad durante los próximos meses. Hora y media después volvimos al barrio y pasamos por un mercadona para comprar los ingredientes para hacer unas fajitas legendarias. Un par de fajitas, una botella de vino y varias partidas perdidas al Unite después nos dieron las ...

De nuevo, pasamos la mañana currando. Y a las 2 volvimos al Gottan a por la hamburguesa Galesote, llamada así por el cómico que (dicen que) la creó. Con salsa de happy hipo Volvimos al piso y echamos unos Unites mientras Pedro terminaba de currar. Su jornada terminaba a las 6, aunque por no llegar demasiado tarde a Almagro salimos a las 5 y llevé su coche hasta la primera parada mientras él terminaba unas cosas. Rocío y Jose iban en el otro coche pisándole un poco más y nos llamaron un par de veces para avisarnos de peligros en el trazado, como lluvia o un par de accidentes con los que nos cruzamos. Con la lluvia fuimos más despacio y al final llegamos a Almagro a las 11 lo suficientemente cansado como para no salir.

Pasamos la mañana currando en la misma disposición física que ayer y a la hora de comer fui con Jose a por un pollo asado al carbón. A las 5 y algo llegó Roció e hicimos tiempo hasta las 6, que Pedro terminó de currar.  Fuimos al centro a ver las procesiones, aunque llegamos pronto y tuvimos que hacer algo de tiempo mientras llegaban los primeros nazarenos. Primero llegó el Señor de los Pasos. Y luego la Virgen del Rocío. Luego fuimos al Pichi de Cái a cenar.  El pulpo a la brasa siempre está espectacular Estuvimos hablando de los pisos de estudiantes en Ciudad Real, de las partidas de Jose y Pedro al Hallball y de las cenas de wraps de pollo y queso cuando querían comer un poco más sano. Volvimos al piso un poco antes de las 12 y echamos un Unite antes de irnos a dormir.

Nos fuimos levantando entre las 8 y media y las 9 y pasamos la mañana trabajando.  Me había pedido medio día de vacaciones, terminé a la 1 y estuve con hombro con hombro con Jose haciendo un poke para comer.  Sin ningún tipo de duda top 3 pokes jamás cocinados por el hombre Estuvimos de chill y de Unites hasta las 6, que Pedro terminaba de trabajar. Cuando estábamos terminando de ducharnos recibimos la triste noticia de que las procesiones se cancelaban por la lluvia, y como llevábamos todo el día en el piso salimos a dar una vuelta por el malecón. Después de casi una hora andando llegamos hasta un rompeolas y nos hicimos unas fotos. Volvimos al piso a las 8 sin que nos hubiera llovido lo más mínimo e hicimos una cena con lo que teníamos por ahí.   Y nos vimos en maratón los 3 capítulos que nos quedaban del Problema de los 3 cuerpos antes de dormir.

Nos levantamos sin prisa y fuimos al castillo de Gibralfaro. Las vistas subiendo eran una pasada pero cuando accedimos al castillo, previo pago de 3€, se volvieron espectaculares. Luego bajamos y, aprovechando que en Semana Santa es gratis, pasamos a ver la catedral. Luego fuimos a la Alameda y conseguimos un buen sitio para ver la procesión. Al principio solo había nazarenos Pero eran la 1 y media y teníamos reserva a las 2, e iba tan lenta que decidimos adelantarnos, ver las imágenes rápido e ir corriendo al restaurante  (y menos mal, porque enseguida empezó a chispear fuerte). Habíamos reservado en el Gottan  atraidos por sus espectaculares hamburguesas y no nos defraudaron. Luego dimos una vueltecilla y volvimos al piso y Pedro, por no verse sumido en el ostracismo más profundo, se animó a bajarse el Unite y le aprendimos a jugar. Pasamos la tarde alternando capítulo...