De incendios cercanos y conciertos en huertos

Como la tarea con la que estaba de repente se embarró muchísimo, tuvimos que organizar una reunión multitudinaria para el lunes y me quedé sin nada que hacer estuve aprendiendo a Raquel un poco de C++.

Como todos los viernes, la empresa estaba prácticamente vacía así que comí tarde y solo.


Sobre las 3 empezó a verse un poco de humo que a los 5 minutos se había convertido en una columna negra azabache, que luego vimos en noticias que fue por el incendio de un centro comercial en obras calle abajo.


Aunque me podía haber ido, al subir a por mis cosas Enrique me pidió ayuda para solucionar una cosa, y después de arreglarlo me comentó de pasada que era de San Fernando, le conté mi fugaz viaje allí cuando vivía en Cádiz, dimos una vuelta por Google Maps mientras me enseñaba los lugares más típicos (resultó que la plaza donde comí estaba era de su instituto) y acabamos hablando de lo vicio que tiene al Age Of Empires II y el mío al Rocket League, y poco antes de irme nos ofrecimos a aprender al otro a jugar.

Pasé por casa para ducharme y cogí un Zity dirección el huerto de Manoteras a.k.a. el huerto del Rodri, donde había concierto.


Me los encontré terminando de regar sus fresas, e hicimos un poco de tiempo mientras llegaban Cris,  Irene, Bea y Adri y empezaba el concierto, que estuvo bastante más guay de lo que esperaba (aunque el pop fantasía no tenía tanta fantasía como nos quisieron hacer creer).


Cenamos unos bocadillos que vendían los organizadores en un chozo improvisado y bastante favelero.


El concierto terminó sobre las 12 y media, y con lo mal comunicado que estaba de todo terminé llegando a casa una hora después

Comentarios

Entradas populares de este blog

De hamburguesas para llevar

De programmers y runners

De tanatorios y purpurina