De primeras dosis de vacunas y primeras clases de boxeo

Sobre las 10 me pasé por el centro de salud a por la primera dosis de Pfizer. Fue to rápido; me acerqué a un mostrador a preguntar si era ahí y cuando me quise dar cuenta una chica se había acercado por la espalda y me había vacunado.

Pasé el resto del día sin molestias ni efectos secundarios, y a las 9 me pasé por el Borán a boxeo. Ángel y Jesús me estuvieron aprendiendo a tirar puños generando fuerza con los pies y la cadera. Luego hicimos varios ejercicios alternando técnica y puro cardio y al final nos tumbamos todos en el suelo en círculo y cada uno fuimos proponiendo un ejercicio corto (plancha, burpees, flexiones...) hasta que dimos una vuelta.

La clase estuvo genial, aunque me faltaron unas vendas para poder pegar más fuerte sin miedo; cuando salí me busqué unas por Amazon y después de pedirle al Félix su visto bueno las encargué para la clase del martes que viene.

Entre que llegué a casa, me duché y cené me dieron casi las 11, y me enganché a media a la peli Una buena receta.