De surferos que vuelven al mar y chefs que vuelven a la cocina
Por la mañana el Diego y yo estuvimos más liados de reuniones así que estuvimos trabajando por separado. A la 1 y media que me puse a hacer la comida, un poke de salmón y aguacate, y como el Rafa llegaba antes por ser viernes me estuvo ayundando.
Cuando terminamos de comer seguimos currando hasta las 4 y media hora después estábamos con el bañador bajando a alquilar neoprenos y tablas al OffShore. Conocimos esta tienda porque el Rafa se la encontró de casualidad y cuando me dijo que el dependiente parecía Cuasimodo pensaba que exageraba, pero después de verle me di cuenta de que se quedaba corto.
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Está mucho más cerca de Cortadura que el CFC |
Cuando estuvimos vestidos fuimos a Cortadura, calentamos y nos metimos al agua pero estaba demasiado tranquila. De la hora y media que estuvimos dentro nos pasamos la mitad sentados en la tabla en mitad del mar esperando a que llegara alguna ola aunque pillamos varias bastante buenas.
Cuando salimos el Rafa nos estaba esperando en la orilla y nos hizo un par de fotos.
Además de porque estaba más cerca de la playa buena, habíamos ido a esa tienda porque al Rafa le habían cobrado bastante menos que en el CFC, pero a la hora de pagar me dijo incluso más que en el otro sitio, así que cuando salimos me despedí de él pensando en no volverle a ver.
Subimos a casa y después de ducharnos el Rafa fue al salón a ver el partido mientras ponía tweets y el Diego y yo nos metimos en la cocina a hacer cositas, él un bizcocho y yo la lasaña que les había prometido para comer mañana.
Aunque había comprado las cosas ayer me di cuenta de que no teníamos zanahorias, así que bajamos en un momen a la tienda de la esquina a por ellas, pero yo me dejé la mascarilla en casa y me quedé fuera como un perrillo abandonado mientras veía cómo el Diego compraba las cosas.
Subimos y el Diego metió el bizcocho en el horno mientras yo terminaba la lasaña. Además, hicimos una crema de calabacín con la olla a presión y pasta con un poco de la boñosera para cenar y a lo tonto estuvimos casi 3 horas en la cocina.
Después de cenar no teníamos ningún plan así que buscamos una peli en Netflix para ver con la mala suerte de dar con Legión de Ladrones, y después de ver dos tercios y estar durmiéndome sugerí amablemente terminar de verla al día siguiente cuando todos sabíamos que no iba a pasar, así que nos despedimos y nos fuimos a dormir.
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