De paseos nostálgicos y mano de obra barata

Por la mañana saqué algunos ratitos para ir haciendo la cheescake de mango para el viernes, pero había un punto en el que había que separar el mango en dos y por estar haciéndolo rápido se me pasó y terminé mezclando el resto de ingredientes con el doble de mango, con lo que al separar la cantidad que necesitaba el resto de ingredientes quedaron diluidos, pero la cantidad de gelatina estaba bien y contra todo pronóstico creo que lo he conseguido salvar.

El Agus y el Jaco llegaron por la mañana a Almagro, y aunque comieron con Álvaro y Jaime en la plaza yo andaba liado con el curro y no me uní a ellos en el Marqués hasta las 4 y media. Natalia vino después y al poco se fueron ella a clase y Jaime a trabajar a Macondo.

El resto nos fuimos a dar un paseo nostálgico hasta Clavero pero al llegar nos dimos cuenta de que hacía demasiado calor como para ir dando vueltas por el pueblo, así que volvimos a Macondo, que tenía al Joseda y aire acondicionado.

Sobre las 7 y media fuimos a casa a montar la piscina para el sábado.

Fue menos lío de lo que pensaba, y en 20 minutillos la teníamos ready,

Natalia y Jaime llegaron al terminar de trabajar y estuvimos todos en el solar tomando unas cerves,

Sobre las 9 y media recogimos y acompañamos a los de Tines a la parada del bus de vuelta a Ciu, a la vuelta dejamos a Álvaro y Natalia en la plaza y el Joseda, Jaime y yo nos despedimos en Mangalamar. 

Llevo en casa un ratete y he cenado, entre otras, un batido con parte de la mezcla que me sobró de la tarta, y ahora mismo son las 11 y media y creo que por fin ha llegado el día en el que me acuesta a una hora razonable y pueda dormir más de 5 horas.