De cosas que voy a echar de menos

Voy a echar de menos clavar las persianas automáticas con capuchones de boli cada mañana.

A Diego hablando en gaditano.

Las historias de senegaleses en cuevas granadinas de Antoñete.

Que Rafa diga el papá... el papá... el papá de los polluelos.

Las historias de surf en California del Toni.

Poner canciones de rap en la tele con Antoñete.

Salir a correr hasta la catedral y volver con Diego y Antoñete.

Que Rafa me pregunte qué especias le puede echar a la carne.

Entrenar en las barras de la playa con Sara.

Que Irene se coma mi lasaña.

Las noches en el salón cada uno a sus movidas y oír de vez en cuando decir al Diego "puto lol..." y a Rafa gemir excesivamente alto.

Turnarme con Diego para hacer la comida.

Montar una sala de estudio en el salón con Diego y Antoñete y que se dedique a mirar recetas de cocina.

Los paseos por el paseo marítimo para estirar las piernas después de no haber hecho nada en toda la tarde.

Que Rafa me diga lo duro que es ser Rafa Reyes.

Los avituallamientos en el Mercadona en el coche del Diego.

Que el Rafa deje la alfombrilla empapada en mitad del baño.

Que la tostadora me queme el pan cada puto día.

Montar la red de volley en la playa.

Ir al argentino del Mercado a pedir una empanada criolla.

Las historias de controles de policías corruptos con metralleta en Marruecos de Antoñete.

Ver Ataque a los Titanes con Diego.

Que Josele me llame cañoncito.

Quedar para cocinar todos juntos los domingos.

Asomarme a la ventana del salón para vigilar el mar.