De floristas folclóricos
Como todos los sábados de mayo, a las 10 quedamos en la sede para hacer los ramos de la noche.
Terminamos a la 1 y pico y, como comía solo, me quedé con Rami y los hermanos Borondo en la plaza tomando unos vermús.
Nos despedimos una hora larga después, volví a casa y me preparé la comida motivándome con Nighthawk de fondo.
Pasé estuve un par de horillas con el Shadows y a las 8 y pico fui dando un paseo hasta la iglesia de los Dominicos, desde donde fuimos a la ronda de la cruz de la calle Bolaños.
Desde ahí fuimos cantando hasta la plaza.
La segunda ronda era la casa de Bebes y Antonio.
Primero cantamos a la cruz.
Y luego a las 30 ó 40 personas que habían venido.
Y tras tocar, cenar y volver a tocar salieron todos a despedirnos a la calle.
Y a las 11 y media estábamos llegando a nuestra última ronda, la cruz de Leo.
Leímos unos ramos.
Y antes de volver a tocar, pasadas las 12, cantamos el 67 cumpleaños feliz a Rami.
Y seguimos tocando otro rato más.
Al final terminamos a la 1 y mucho, llegué a casa a las 2 y me acosté corriendo para ir mañana a la survivor race.
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