De trasteros llenos y reencuentros gaditanos

Nos levantamos pronto para no salir muy tarde de Málaga y volvimos a empezar la mañana con un bol hipercalórico de avena con cosas.

Aunque yo pasé la mañana trabajando, Diego estuvo llevando las cosas al trastero para dejar el piso y le estuve echando una mano para bajarlas hasta el coche.


Al final se nos hizo tarde y acabamos saliendo del piso a las 5, y entre que dimos otros viaje al trastero y que que fuimos a ver su nuevo piso en construcción dejamos Málaga a y media.

3 horas y pico del tirón eran mucho, y paramos media horilla en un hotel random de carretera a comer algo.

Llegamos a Valdepeñas a las 9 y quedamos con Jose y un amigo del Diego en el Comendador para cenar.

Hacía casi 2 años que no veía al Jose y poniéndonos al día, pero aunque nos quedaron muchas cosas por hablar aún teníamos un rato hasta llegar a casa. 

Un poco antes de la 1 nos despedimos con fuertes abrazos y volvimos al coche. Diego me dejo en Almagro y siguió hasta Ciudad Real, y yo me acosté en cuanto llegué a casa.

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