De chefs italianas y seriéfilos gourmet
Pasamos la mañana trabajando y María hizo real carbonara para comer.
Cuando terminamos de trabajar salimos a dar una vuelta por el centro y pasamos por otra calle Libreros, acordándonos inmediatamente de los maconders.
Volviendo a casa nos cruzamos con una tienda de empanadas argentinas y no pudimos la urgencia de comprar algunas para cenar.
Y en cuanto volvimos al piso las pusimos a calentar y cenamos viendo el cuarto y el quinto de TLOU.
Y a las 12 nos fuimos a dormir para madrugar mañana.
Comentarios
Publicar un comentario