De paseos nocturnos y fotógrafos sin miedo
Bea, Cris y yo quedamos para dar una vuelta cuando salí del curro. Quedé con Cris en la boca de metro y fuimos andando a casa de Bea, y desde ahí nos fue guiando por su barrio mientras hablábamos de la vida y se nos hacía poco a poco de noche.
Este fue el paseo final |
Cuando empezamos a sentir el cansancio nos sentamos en las terrazas de tantas otras veces a tomar un refrigerio.
Se nos empezó a hacer tarde y yo no tenía ni cena ni comida para mañana así que volvimos a casa.
El Edu había quedado así que hice mis quereseres en un silencio casi religioso y me acosté relativamente pronto.
Comentarios
Publicar un comentario