De vueltas a la rutina, cocinas quemadas y dinosaurios de peluche

Aunque el despertador sonó a las 8.30 tardé casi una hora en conseguir levantarme de la cama.

Por la mañana estuve bastante perdido hasta que empecé a recordar y ponerme al día aunque sobre la 1 empecé a oler algo raro y salí de mi habitación a investigar.



Máter se había ido dejando el fuego al máximo.


Después de apagar y abrir todo para que ventilara tardó un rato en despejarse la humareda.

Empezando tan tarde no terminé hasta las 6 alrgas, y a las 8 quedamos los compadres para celebrar la efeméride del nacimiento de Edu, aunque Jaime se fue porque tenía gym. Casi todo estaba cerrado así que terminamos tomando unas cerves en Di Patri, y aunque Edu y Álvaro se pidieron una pizza yo tenía cena en casa así que me resistí.

Hablando, en algún momento salió el tema del Pokemon Unite y aprovechamos para perder jugar una partida.


Un poco antes de las 10 vino Jaime y un poco después Natalia, quien nos pilló perdiendo jugando una segunda partida (no he visto el vídeo pero imagino que se oye todo de fondo).


Estuvimos poniéndonos al día y comentando lo feo que había estado la jugada de Fer en el amigo invisible, y sobre las 11 fuimos a Macondo para que Edu le diera su regalo a Nat; un libro y un peluchete de un T-Rex.

Enseguida nos fuimos para casa, cené rápido y a las 12 y media ya estaba en la cama para poder levantarme a las 8 y media. Después de 2 semanas de vacaciones no recordaba lo corto que se hacen los días currando y el poco tiempo que queda para hacer absolutamente nada.

Comentarios

Entradas populares de este blog

De hamburguesas para llevar

De programmers y runners

De tanatorios y purpurina