De parejas de chefs y vueltas campestres
Páter y Máter quedaron para pasar el día con unos amigos así que María se vino a casa a comer.
Como se iba a Granada a media tarde no nos daba tiempo a hacer mucho así que estuvimos preparando pasta mientras charlábamos del viaje.
Sobre las 4 y media la acompañé a casa y luego me fui a dar una vueltecilla por el campo.
De camino me pegó un toque el Carlos para que fuera a su casa a pasar la tarde y a las 5 y media estaba llamando al timbre.
Peter, Diego y Broce ya habían llegado y estuvimos charlando jugando al Strikers Edge hasta las 8 y algo, que nos fuimos.
En casa cené terminando de ver la princesa Mononoke y no me acosté muy tarde.
Comentarios
Publicar un comentario