De reencuentros con compadres y tardes lluviosas

Con todas las ventanas relativamente tapadas pude dormir hasta casi las 9. A lo tonto me dieron las 11, salí para el piso del Edu escuchando el último 4 cosas del Pazos y llegué una hora después.

Estuvimos hablando lo de vivir juntos aunque se nos hizo tarde y bajamos al Mercadona a comprar salmón, aguacate y edamame para un poke.

Cuando volvimos al piso lo tuve de pinche mientras yo preparaba el salmón.


Para sorpresa de nadie nos quedó bastante bueno.


Aunque el plan era salir por la tarde a tomar algo empezó a llover bastante fuerte, así que nos quedamos en el salón viendo vídeos de TierZoo y Ghost Town Living y GDC, con un break para bajar al chino a por un par de pizzas. Con la de que Dark Souls es el Ikea de los videojuegos nos dieron las 10, así que previsoramente me fui y he llegado a casa a las 11.


Después de whatsappear un poco y de jugar media hora al Valhala me acosté sobre la 1 y media, y al quitar mi música, empecé a oír que los del apartamento de al lado estaban tocando el piano ridículamente alto. A los 10 minutos seguían igual así que me levanté bastante caliente, les pìqué a la puerta y les dije que si eran subnormales. Me dijeron que no sabían que se oía tanto y que lo sentían y que no volverían a ponerla y por fin pude dormir.

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