De protopadres

Parece que lo de jugar unos Rockets después de currar ha llegado para quedarse. El resto de la tarde lo he pasado en casa del Nitro hablando de los intarnsitados caminos por los que nos lleva la vida y de lo poco que le queda para ser el progenitor de una vástaga

Después ha llegado su hermana y hemos jugado un rato al Majotori hasta cerca del toque de queda (por si releo esto dentro de unos años, las 10), y por la noche he hech una empanada y hemos visto un par de capítulos más de 30 monedas.


Comentarios

Entradas populares de este blog

De hamburguesas para llevar

De programmers y runners

De tanatorios y purpurina