De bereberes achacosos
Aunque sigo regular, la idea de salir a correr un rato con Alberto era demasiado atractiva y quedamos a las 5 para recorrer la orografía calatrava. No contaba con un sol tan fuerte y tuve que elegir entre quemarme la cabeza o la espalda Con los pulmones anegados de mocos me ahogaba constantemente e hicimos un tiempo peor que los días que empezamos a salir, aunque por lo menos las deportivas eran cómodas. Nos despedimos en su casa y de camino a la mía me encontré con un librero encarcelado. ️La fina línea entre el opositor y el preso 👮 A las 8 fui a ensayar con los mayos y tras el cambio de hora del finde no hay color entre ir por la calle así o siendo noche cerrada. Al ensayo faltaron las guitarras más veteranas así que el par de novatos tuvimos que esforzarnos más para no fallar sin nadie a quien seguir, lo que lo hizo bastante más divertido. A las 10 volvimos a casa, cena y algidol y a dormir.