De trenes malagueños y entrevistas italianas
Casualmente mi madre también tenía un ave de madrugada para pasar el día a Madrid, así que los dos nos levantamos a las 6 y poco y fuimos a Ciudad Real. Mi tren salía a las 7 y cuarto y el suyo un poquito después, así que se quedó tomando un café mientras yo ponía rumbo a Málaga. Obviamente pasé el trayecto telecurrando con el hotspot del móvil. Y llegué a Málaga a las 9 y media. Fui dando un paseo hasta Huelin y quedé con Jose y Rocío en el Lucys para desayunar antes de ir al piso a seguir trabajando. Jose se fue a dar clase por la tarde, me quedé con Rocío poniéndonos al día y cuando volvió salimos a dar una vuelta por el paseo marítimo y a tomar una cervecita. Volvimos al piso para preparar la cena y estuvimos viendo la Revuelta mientras echábamos unos Unites. Rocío, con su C2 en italiano, se partía Y antes de las 12 nos estábamos acostando.